La última hora de este entramado de corrupción es , nada más y nada menos, la esperada dimisión de Ábalos.
Pero es una dimisión a medias.
Deja su cargo de presidente en la Comisión de Interior pero no su acta de diputado del PSOE por Valencia.
En realidad parece que se trata de una actuación entre bambolinas en la que el guión deja para el protagonista un final (por ahora abierto).
Es una obra de teatro en la que los títeres despiertan el interés del público (los españoles , pese lo que nos pese) con un primer capítulo en el que el prota Ábalos entona el «mea culpa» y dimite de uno de sus cargos.
En el segundo capítulo titulado In dubio pro reo, ya nos deja entrever que su acta de diputado no la suelta, y eso que su partido le ha pedido que lo lo haga en aras a … poned vosotros un final porque esta pantomima va para rato.
Desde este enlace puedes leer la última hora sobre este caso con la Dimisión de Ábalos.
26 feb 2024